Esta semana he estado bastante ocupado entre la universidad y cosas del colegio mayor y no he podido escribir. En breve volveré con LFG, un artículo sobre el festival de series de Canal + y algunas fotos que he ido haciendo; sin embargo, hoy he querido escribir una de esas cosas que te salen del alma, que para eso hago esto gratis ( alguna ventaja debo tener sobre los que bloggean sólo por dinero ).
He escrito muchas cosas en estos últimos 2 años pero por lo general intento mantenerme lejos de los aspectos más personales de mi vida; hace unos días alguien del cole vió mi artículo sobre la vida en el mismo y me preguntó por qué no hablaba de mi grupo de amigos allí, así que he decidido dedicarle un espacio a mis amigos, las personas más cercanas a mí, que me rodean cada día, apoyándome, corrigiéndome y ayudándome a seguir adelante. Esta lista de nombres no significará nada para la mayoría de los lectores pero os invito a todos a que reflexionés sobre vuestros amigos, sus pequeños detalles y las experiencias vividas con ellos.
Elaborar la lista no ha sido fácil, he tenido que elegir a aquellos en los que tengo una confianza absoluta, de otra forma me podría tirar días escribiendo.
Es difícil elegir por donde empezar pero creo que esta vez debería hacerlo con Ricardo, quien ha sido amigo mío desde los 4 años. Tras 14 años juntos hemos tenido nuestras diferencias pero creo que es algo normal y al final todo ha terminado saliendo bien; con él he vivido tantas cosas que es imposible recordarlas todas, desde los momentos más cotidianos hasta otros más extraordinarios como viajes a Alemania, Noruega o Italia. Al ser hijo único creo que tanto para mis padres como para mí ha sido como si fuese mi hermano y seguramente haya ocurrido al revés también.
Al hablar de Ricardo me viene a la cabeza Ángel, mi amigo más impuntual, no os penséis que lo hace a propósito, no puede evitarlo, alguna vez incluso ha tardado 30 minutos en llegar pero yo no lo veo como un defecto sino como uno de esos pequeños detalles que lo definen. Es de esas personas que parecen estar relajados siempre, algunas veces llegas con algo que te come el coco y él se limita a mirarte fijamente con unos grandes ojos saltones mientras se encoge de hombros, al final no te queda más remedio que reírte y olvidarte del problema.
Luego está Jaime, el personaje más curioso de mi grupo de amigos de Albacete. Es el encargado de poner de moda las frases más estúpidas del mundo y que al final acabamos repitiendo todos, todavía tengo grabado a fuego lo de : " Este coche recorre 300 hectáreas con un solo bidón de queroseno ... " . También es el más espontáneo, lo mismo un día te lo encuentras en pijama a las 6 de la tarde y el siguiente se aburre y sale con traje y gafas de sol a hacerse fotos en las casas de sus amigos para subirlas al tuenti. Jaime siempre está ahí por si necesitas hablar o por si sólo quieres echar unas risas.
Pasemos ahora a Carlos, el listo. Algunos se sienten frustrados cuando hay alguien que saca mejores notas que ellos o que destaca en muchas cosas, yo me siento orgulloso de decir que uno de mis mejores amigos es un crack de las mates ( que llegó a quedar el nº 30 y algo de la olimpiada nacional ), ganador de la olimpiada regional de biología, estudiante de medicina y con tiempo suficiente para ir a taekwondo o mejorar su inglés. Además de sus logros académicos es un gran amigo que siempre está cerca de una forma u otra ( *cough* Señor X *cough* xD ).
Para cerrar el grupo de amigos de Albacete queda Tomás, el poeta del blog. Aunque muchas veces le diga que sus poesías son noñas o me parezca que hay momentos en los que tienen poco sentido en realidad lo admiro por ser capaz de hacer algo que yo no podría. Ha sido un gran y necesario apoyo para el blog y no sé si esto habría funcionado sin él o si sería lo mismo, seguramente no. De vez en cuando viene con alguna idea loca para hacernos ricos o dominar el mundo, algún día vendrá con alguna que funcione de verdad y entonces podré dejar de estudiar.
Llega el turno de la gente que he conocido en Madrid, en el colegio San Juan Evangelista; todavía se me hace raro pensar que aunque los conozco desde hace poco más de un mes parece que lleve con ellos toda la vida.
Como es normal no nos conocimos todos de golpe; en mi primer día conocí a Marta cenando. La primera cosa que llama la atención a la gente sobre ella es que tiende a "saltar a su mundo"; estás hablando con ella y cuando te fijas está con la mirada perdida viendo cualquier pequeño detalle de la habitación, basta con decirle algo para que te devuelva una rápida sonrisa mostrándote que ya está de vuelta y que va a escuchar lo siguiente que digas, generalmente ocurre durante las comidas y ella lo achaca a que piensa mucho. Tiene grandes sueños pero no es de esos que se quedan ahí sino que se esfuerza por hacerlos realidad.
Después vino Alberto, mi compañero de habitación. La gente dice que no podemos ser más diferentes, de hecho, creo que nuestra mayor similitud es que vamos a la facultad de Matemáticas. En nuestra habitación también hay un gran contraste, por un lado mis posters de Londres junto a una colcha colorida y un armario variado y ordenado y por otro su armario, rebosante de ropa negra apilada, y su poster de un grupo de "heavies" desnudos en la piscina cubriéndose con guitarras. Lo mejor de todo es que nunca me aburro con él en la habitación y tampoco se queja cuando suelto todos esas cosas que me rondan la cabeza y empiezo a divagar sobre cualquier chorrada.
Al hablar de compañeros de habitación tengo que mencionar a Pascual, un curioso personaje que pasa más tiempo en mi habitación que en la suya. Estudia aeronáutica, aunque la verdad es que no le pega nada; enamorado de la música, gran lector y persona que aprovecha cualquier oportunidad para empezar un debate filosófico que muchas veces es demasiado profundo para una cabeza como la mía. Aunque algunas veces nos referimos a él como "catalán" u "ocupa" sabe que lo hacemos de broma y desde el cariño. Suele estar por ahí cuando hablo de lo que me preocupa y hace de voz de la razón.
Por último he de hablar de Alba, la que motivó todo este artículo con un comentario que según recuerdo fue : " Joooo, has escrito un artículo del cole y no hablas de nosotros ... ". Es la optimista del grupo, a veces me recuerda un poco a una niña pequeña porque siempre está sonriendo; tiene la teoría de que todo debe fluir ( está intentando enseñarme su filosofía pero soy un mal alumno ) y rara vez la he visto de bajón. Con ella me pasa lo mismo que con Ángel, le cuento mis problemas y todo parece volverse más simple. Creo que sin ella las reuniones serían bastante más sosas y tristes.
He escrito muchas cosas en estos últimos 2 años pero por lo general intento mantenerme lejos de los aspectos más personales de mi vida; hace unos días alguien del cole vió mi artículo sobre la vida en el mismo y me preguntó por qué no hablaba de mi grupo de amigos allí, así que he decidido dedicarle un espacio a mis amigos, las personas más cercanas a mí, que me rodean cada día, apoyándome, corrigiéndome y ayudándome a seguir adelante. Esta lista de nombres no significará nada para la mayoría de los lectores pero os invito a todos a que reflexionés sobre vuestros amigos, sus pequeños detalles y las experiencias vividas con ellos.
Elaborar la lista no ha sido fácil, he tenido que elegir a aquellos en los que tengo una confianza absoluta, de otra forma me podría tirar días escribiendo.
Es difícil elegir por donde empezar pero creo que esta vez debería hacerlo con Ricardo, quien ha sido amigo mío desde los 4 años. Tras 14 años juntos hemos tenido nuestras diferencias pero creo que es algo normal y al final todo ha terminado saliendo bien; con él he vivido tantas cosas que es imposible recordarlas todas, desde los momentos más cotidianos hasta otros más extraordinarios como viajes a Alemania, Noruega o Italia. Al ser hijo único creo que tanto para mis padres como para mí ha sido como si fuese mi hermano y seguramente haya ocurrido al revés también.
Al hablar de Ricardo me viene a la cabeza Ángel, mi amigo más impuntual, no os penséis que lo hace a propósito, no puede evitarlo, alguna vez incluso ha tardado 30 minutos en llegar pero yo no lo veo como un defecto sino como uno de esos pequeños detalles que lo definen. Es de esas personas que parecen estar relajados siempre, algunas veces llegas con algo que te come el coco y él se limita a mirarte fijamente con unos grandes ojos saltones mientras se encoge de hombros, al final no te queda más remedio que reírte y olvidarte del problema.
Luego está Jaime, el personaje más curioso de mi grupo de amigos de Albacete. Es el encargado de poner de moda las frases más estúpidas del mundo y que al final acabamos repitiendo todos, todavía tengo grabado a fuego lo de : " Este coche recorre 300 hectáreas con un solo bidón de queroseno ... " . También es el más espontáneo, lo mismo un día te lo encuentras en pijama a las 6 de la tarde y el siguiente se aburre y sale con traje y gafas de sol a hacerse fotos en las casas de sus amigos para subirlas al tuenti. Jaime siempre está ahí por si necesitas hablar o por si sólo quieres echar unas risas.
Pasemos ahora a Carlos, el listo. Algunos se sienten frustrados cuando hay alguien que saca mejores notas que ellos o que destaca en muchas cosas, yo me siento orgulloso de decir que uno de mis mejores amigos es un crack de las mates ( que llegó a quedar el nº 30 y algo de la olimpiada nacional ), ganador de la olimpiada regional de biología, estudiante de medicina y con tiempo suficiente para ir a taekwondo o mejorar su inglés. Además de sus logros académicos es un gran amigo que siempre está cerca de una forma u otra ( *cough* Señor X *cough* xD ).
Para cerrar el grupo de amigos de Albacete queda Tomás, el poeta del blog. Aunque muchas veces le diga que sus poesías son noñas o me parezca que hay momentos en los que tienen poco sentido en realidad lo admiro por ser capaz de hacer algo que yo no podría. Ha sido un gran y necesario apoyo para el blog y no sé si esto habría funcionado sin él o si sería lo mismo, seguramente no. De vez en cuando viene con alguna idea loca para hacernos ricos o dominar el mundo, algún día vendrá con alguna que funcione de verdad y entonces podré dejar de estudiar.
Llega el turno de la gente que he conocido en Madrid, en el colegio San Juan Evangelista; todavía se me hace raro pensar que aunque los conozco desde hace poco más de un mes parece que lleve con ellos toda la vida.
Como es normal no nos conocimos todos de golpe; en mi primer día conocí a Marta cenando. La primera cosa que llama la atención a la gente sobre ella es que tiende a "saltar a su mundo"; estás hablando con ella y cuando te fijas está con la mirada perdida viendo cualquier pequeño detalle de la habitación, basta con decirle algo para que te devuelva una rápida sonrisa mostrándote que ya está de vuelta y que va a escuchar lo siguiente que digas, generalmente ocurre durante las comidas y ella lo achaca a que piensa mucho. Tiene grandes sueños pero no es de esos que se quedan ahí sino que se esfuerza por hacerlos realidad.
Después vino Alberto, mi compañero de habitación. La gente dice que no podemos ser más diferentes, de hecho, creo que nuestra mayor similitud es que vamos a la facultad de Matemáticas. En nuestra habitación también hay un gran contraste, por un lado mis posters de Londres junto a una colcha colorida y un armario variado y ordenado y por otro su armario, rebosante de ropa negra apilada, y su poster de un grupo de "heavies" desnudos en la piscina cubriéndose con guitarras. Lo mejor de todo es que nunca me aburro con él en la habitación y tampoco se queja cuando suelto todos esas cosas que me rondan la cabeza y empiezo a divagar sobre cualquier chorrada.
Al hablar de compañeros de habitación tengo que mencionar a Pascual, un curioso personaje que pasa más tiempo en mi habitación que en la suya. Estudia aeronáutica, aunque la verdad es que no le pega nada; enamorado de la música, gran lector y persona que aprovecha cualquier oportunidad para empezar un debate filosófico que muchas veces es demasiado profundo para una cabeza como la mía. Aunque algunas veces nos referimos a él como "catalán" u "ocupa" sabe que lo hacemos de broma y desde el cariño. Suele estar por ahí cuando hablo de lo que me preocupa y hace de voz de la razón.
Por último he de hablar de Alba, la que motivó todo este artículo con un comentario que según recuerdo fue : " Joooo, has escrito un artículo del cole y no hablas de nosotros ... ". Es la optimista del grupo, a veces me recuerda un poco a una niña pequeña porque siempre está sonriendo; tiene la teoría de que todo debe fluir ( está intentando enseñarme su filosofía pero soy un mal alumno ) y rara vez la he visto de bajón. Con ella me pasa lo mismo que con Ángel, le cuento mis problemas y todo parece volverse más simple. Creo que sin ella las reuniones serían bastante más sosas y tristes.
Este ha sido mi pequeño tributo a las personas más cercanas a mí, me ha llevado sobre dos horas escribir este artículo con el que he ido reflexionando sobre ellos a la vez que intentaba señalar alguna característica suya que llama la atención a la vez que los hace especiales y diferentes. Sin todos ellos no creo que fuese el mismo, pero estoy seguro de que a todos nos pasa lo mismo; a todos nos ha sacado alguna vez un amigo de un apuro o nos ha ayudado a seguir adelante cuando nos hemos quedado sin energías.
¿Cómo sería la vida sin amigos? No quiero ni pensarlo.
Un saludo a todos